Si tienes una página web y no sabes aún qué es el search engine optimization, no tienes más tiempo que perder. Hay más de 200 factores para el posicionamiento web en buscadores que influyen en la visibilidad de tu sitio.

Contar con un sitio web y que los usuarios no te encuentren en sus búsquedas es como no tenerla. Y en eso tiene mucho que ver el posicionamiento web.

El SEO (Search Engine Optimization) es el conjunto de técnicas con las que se mejora la posición de un sitio web en los resultados de los buscadores. Principalmente, en Google, que en España acapara más del 90% de las búsquedas.

Y, ¿cómo posiciono mi web? Antes, deberíamos empezar por comprender cómo ordena Google los resultados de búsqueda. Cuando realizamos una búsqueda, Google bucea en el índice en el que almacena todas las páginas que tiene indexadas. Igual que si pedimos un libro en la biblioteca, el bibliotecario no consulta entre los libros de las estanterías, sino en el catálogo. Esto quiere decir que, en primer lugar, las páginas de tu sitio web deben estar indexadas por Google.

¿Cómo ordena Google los resultados? Con un algoritmo en el que influyen más de 200 factores: cuántas veces aparecen las palabras clave de tu búsqueda y sus sinónimos en cada página, y en qué proporción; en qué lugares del contenido aparecen; la autoridad que tiene cada sitio web que contiene información relevante para tu búsqueda…

Este vídeo del ingeniero de Google Matt Cutts puede ayudarte a entender mejor este proceso:

 

Y ahora, vamos a la parte práctica: ¿qué puedo hacer para posicionar mi web? Distinguimos entre dos tipos de factores que influyen en el posicionamiento web: el SEO on page y el SEO off page. O lo que es lo mismo: los factores que dependen de tu sitio web en sí mismo y los que tienen que ver con la relación de tu sitio con otras páginas.

Factores que influyen en el SEO on page

Antes de nada, una idea básica: a Google le gusta lo mismo que les gusta a los usuarios. Por ejemplo: que tu sitio web no tarde demasiado en cargar; que pueda verse en cualquier dispositivo y que no contenga complementos que no puedan visualizarse en todos; que contenga links internos que faciliten la navegación y enriquezcan el texto; que interprete como relevantes en tus textos las palabras clave que busca el usuario…

El SEO on page incluye multitud de factores para el posicionamiento. Aquí van unos cuantos:

 

  • Velocidad de carga del sitio: cuanto más rápido, mejor
  • Antigüedad del dominio: cuanto más antiguo, mejor
  • Que el servidor en el que se alberga tu sitio esté en el país en el que se realizan las búsquedas (en tu mismo país por lo general, vaya)
  • Diseño responsive: que tu sitio se adapte a cualquier dispositivo, sea accesible y no incluya contenidos en Flash
  • Que no contenga páginas duplicadas: Google lo considerará spam y puede penalizarte, y es más común de lo que nos imaginamos
  • Que las páginas de tu sitio tengan metatítulos y metadescripciones: son el título y la descripción con los que aparece tu sitio web en los resultados de búsqueda, y deben contener las palabras clave por las que consideras que los usuarios pueden buscarte
  • Que las palabras clave de tu sitio aparezcan en los encabezados
  • Imágenes con la etiqueta descriptiva ALT
  • Calidad de los contenidos: originales, relevantes y con palabras clave
  • Que tu sitio no contenga enlaces rotos, y que cuente tanto con links internos como externos
  • Que la estructura de tu sitio sea coherente y las categorías y subcategorías estén relacionadas con la búsqueda del usuario…

 

Y así una larga lista. Aunque hay factores que nunca van a cambiar, para más inri, Google varía cada cierto tiempo su algoritmo, con lo que frecuentemente cambia el peso que le da a cada factor. Los amigos de Moz intentan sintetizar los factores más relevantes en un ranking que publican cada dos años.

Factores de SEO off page

Además de los contenidos, el SEO off page está ganando peso para Google en los últimos tiempos. Ya hemos comentado que el algoritmo de Google tiene también en cuenta la autoridad de tu página a la hora de posicionarla mejor o por en sus resultados; y Google infiere que las relaciones que tiene tu sitio web con otras páginas son un índice de su autoridad.

Si has consultado el enlace al ranking de Moz, habrás observado que los +1 en Google+ o las interacciones que reciben los contenidos de tu sitio web en Facebook son algunos de los factores que más valora Google. Si a los usuarios de redes sociales les gustan tus contenidos, a Google le gustarán también, y eso mejorará tu posicionamiento web en buscadores.

De esto sacamos dos conclusiones: debes hacer labor en redes sociales para compartir y promocionar tus contenidos, y los productos de tu tienda online o las entradas de tu blog deben poder ser compartidos fácilmente (¡que no se te olviden los botones para compartir en las redes!).

Que otros sitios web hagan enlaces a tu página o a los contenidos de tu blog es otra cosa que le gustará a Google: quiere decir que valoran tu contenido como de calidad, de autoridad o relevante. Cuantos más enlaces naturales reciba tu sitio web (backlinks), mejor será su PageRank: el ranking de relevancia que Google otorga a las páginas, que influye también en su posicionamiento. Y cuanto mayor sea el PageRank de las páginas que te linkean, más valor tendrán esos enlaces.

¿Por dónde empiezo a posicionar mi web?

Si no tienes aún sitio web, tienes una ventaja: ya sabes qué tienes que tener en cuenta a la hora de diseñarla o contratar un servidor. Si ya tienes sitio, y quieres mejorar su posicionamiento, el asesoramiento de un experto SEO tampoco viene mal.

Mediante una auditoría SEO podemos determinar qué factores son mejorables en nuestro sitio web, y un correcto mantenimiento SEO nos permite mantener optimizada nuestra web. Lo más importante es que entiendas que el SEO es una carrera de fondo para la que hace falta constancia y preocuparse por hacer las cosas bien. Para tus seguidores y para Google.